el primer y único Kenworth V12 de 600 HP años 1951 |
Durante el año 1951 Kenworth armó un camión
prototipo se trataba ni más ni menos que del modelo convencional de aquellos
años el BC 825-C CONVENTIONAL con motor V12. En esta década Kenworth comenzó a experimentar
con diferentes tipos de plantas impulsoras, buscando una respuesta al futuro
que se venía. También en esta época, Kenworth utilizo camiones prototipos impulsados
con turbinas desarrollado en forma conjunta
con Boeing.
Esta idea de la impulsión de camiones
con sistemas provenientes de la aviación, tractores y barcos era común.
Recordemos que esta empresa desarrollo los motores para loa aviones bombardero Liberty
durante la 2da. Guerra Mundial. Esta experiencia
en la construcción de motores llevo a
Kenworth a utilizar esta marca de aquellos años de motores Hall - Scott, quien
era famosa por el desarrollo de propulsores a gasolina para aviones, que se utilizaron
durante la segunda guerra mundial. Y no solo eso utiliza cámaras hemisférica, válvulas
y arboles a la cabeza. Algo no muy común para la época.
Aprovechado a la experiencia en
motores de alta cilindrada y de múltiples cilindros, Hall – Scott suministro a
Kenworth un motor V 12. Este camión con este motor que era a gasolina fue por
muchos años el más potente del mundo. Esto lo posibilitaba el impulsor Hall-Scott V12 de 600 HP y 2181 pulgadas
cúbicas. Esta empresa también había experimentados por aquellos años motores a
gas.
Por esta razón los legendarios motores de gas de seis cilindros OHC de 1090 pulgadas cúbicas de Hall-Scott fueron los motores de camiones más potentes de su época, generando hasta 310 hp con butano (LPG) en un momento en que los motores diésel luchaban por alcanzar los 150 hp. El camión fue un prototipo desarrollado entre Kenworth y un propietario que necesita de mucha potencia para vencer las alturas y pendientes de las montañas rocosas del oeste americano, que en época de invierno se ponen muy difícil de circular. La unidad tan equipada para mover remolques tanques de un lado al otro de las montañas. Así que le pidió a Kenworth, que siempre fabrico camiones a medida del cliente, que le construyera una nuevo camión, con el gigantesco V12 de 2181 pulgadas cúbicas (38 litros) de Hall-Scott, que no era más que la unión de dos motores de 6 cilindros en un solo Carter. Es decir esencialmente dos grandes seises de 1090 pulgadas cúbicas en un cárter, derivado de un motor para uso marino o industrial. Kenworth tuvo que alargar el capó un pie para acomodarlo, pero lo lograron. Y no solo eso esta unidad podía superar más de 100 Km/h con suma facilidad, dicho de otra manera no era para cualquier conductor, sino para uno que tuviera experiencia.
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