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cada parrilla de Scania Super lleva 5 kilos de botellas usadas |
La visión circular de Scania Brasil
da a las botellas una segunda vida como rejillas de camiones. Este proyecto
exclusivo de Brasil, permite reciclar uno de los materiales plásticos mas utilizados
a diario por el humano. Ya que las botellas plásticas son los envases más
usados en el mundo.
Al transformar botellas de plástico desechadas en rejillas para camiones, Scania Industrial Operations en Brasil está poniendo en marcha la circularidad, reduciendo 62 toneladas de emisiones de CO₂ cada año.
En Scania, la circularidad es clave para un futuro sostenible. Maximizamos el uso de recursos, minimizamos los residuos en toda nuestra cadena de valor y utilizamos nuestro sistema modular para prolongar la vida útil del producto y permitir una reutilización más inteligente. Al sustituir materiales vírgenes por plástico PET reciclado, no solo reducimos el impacto ambiental, sino que también transformamos nuestra percepción de los residuos. Un diseño inteligente puede impulsar un cambio real y añadir valor a lo largo del ciclo de vida de nuestros vehículos.
Innovación en rejillas de PET
reciclado
En nuestra planta de São Bernardo do Campo, está ocurriendo algo realmente extraordinario. Nuestros compañeros de Compras han descubierto una manera de sustituir el plástico virgen por PET reciclado. Sí, el mismo que se usa en las botellas para fabricar la parrilla delantera de todos los camiones que fabricamos allí.
“Esta no es nuestra primera
iniciativa en este sentido ni será la última. Trabajamos en sintonía con la
dirección global de Scania, guiados por el valor fundamental de la 'eliminación
de residuos' y con el objetivo de contribuir a una economía circular. Estamos
desafiando a nuestra gente, nuestras operaciones y a todo el sector a pensar de
manera diferente”, afirma Patricia Acioli, Directora de Comunicación y Sostenibilidad
de Scania Latinoamérica.
La parrilla delantera del camión,
conocida en la jerga automotriz como "T-bone", ahora incorpora
plástico PET reciclado. Gracias a esta innovadora iniciativa, se evita que
alrededor de 1,5 millones de botellas de PET terminen en vertederos o
incineradoras anualmente, con una producción de 30 000 vehículos al año.
Es como darle una segunda oportunidad a la basura, en la vanguardia de la
innovación en el transporte.
Cada rejilla está fabricada con cinco kilos de plástico, una mezcla de policarbonato (PC) y tereftalato de polietileno (PET), donde el PET representa el 20 % de su composición. Anteriormente se obtenía en estado virgen, ahora se recicla un kilo de PET, lo que equivale aproximadamente a 50 botellas de plástico por camión. Este cambio evita la contaminación del medio ambiente, reduce las emisiones de CO₂ en 62 toneladas anuales y el consumo de energía en un 16 % en comparación con materiales vírgenes.
¡Este logro se logra gracias a la
colaboración! El equipo de Compras de Scania en Brasil colaboró con
proveedores que recolectan y procesan botellas de PET posconsumo. Estas
botellas se limpian, transforman y mezclan con policarbonato para crear una mezcla
plástica de alta calidad, ideal para nuestras rejillas.
La transición hacia un plástico más sostenible marca un paso clave en la circularidad. Scania Brasil demuestra cómo el pensamiento circular reduce las emisiones al convertir los residuos en nuevos materiales, reduciendo la huella de carbono de la producción de plástico y promoviendo un futuro más limpio, botella a botella.
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